Otra ocasión en la cual D-s castigó a
un líder por no intervenir, es la siguiente:
Cuando los judíos trataron de
conquistar la ciudad de Ai en Eretz Israel, fueron derrotados. El integrante
más sabio del Sanhedrín, Iair ben Menashé, cayó en el campo de batalla. D-s lo
trató duramente porque un judío había robado del botín prohibido en la
conquista anterior, Ierijó. La responsabilidad de Iair como líder era designar
guardianes para vigilar el botín de Ierijó. A él se le puede aplicar el pasuk
(Ieshaiau 57:1): "El tzadik es recogido (prematuramente) a causa de un
pecado (cometido por alguien del pueblo, ya que D-s considera que el líder es
el responsable)"
"Sepan, sin embargo", previno
Moshé a los judíos, "que vuestros líderes son considerados responsables
sólo si no los guían correctamente. Si los regañan y ustedes no obedecen, ellos
no tienen culpa alguna".
Una vez, mientras la víbora se
deslizaba por su camino, la cola comenzó a quejarse a la cabeza, diciendo:
"¿Por qué siempre estás delante de mí? Me gustaría estar en la
delantera y no en la parte posterior".
"Bueno", respondió la cabeza
"haz lo que quieras". Intercambiaron posiciones y la cola
marcaba el camino. Poco después la víbora se cayó en un pozo fangoso, luego se
chamuscó con el fuego, y finalmente se arañó con un cardo que crecía
en el camino. Ese fue su destino porque la cabeza seguía a la cola (y la cola
no tiene ojos para evitar los peligros).
Del mismo modo, si la gente ordinaria
toma las riendas y las grandes personalidades los siguen (en vez de impedir o
protestar contra el mal comportamiento) los peligros no se pueden evitar.
El Midrásh señala que
el Klal Israel debe recurrir a los líderes de la Tora para que los
guíen. Si los judíos insisten en seguir a "la moda", las desgracias
serán inevitables.
Fuente: El Midrásh, Séfer Devarim, Parashá Devarim
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