Apoyo a Bar Kojba.
Aunque el Rabino Akiva sufriera enormemente en su vida y experimentara muchos acontecimientos calamitosos, sin duda la peor fue la desastrosa rebelión de Bar Kojba. De hecho, fue uno de los principales partidarios de Bar Kojba y declaró que él era el Mesías. Uno podría haber pensado que después de la debacle de Bar Kojba, Rabí Akiva se desmoronaría, sobre todo teniendo en cuenta que él era un hombre muy anciano para entonces, más de 100 años. Tenía todos los motivos para ir a su muerte en silencio.
él empezó de nuevo y enseñó Torá a cinco estudiantes que se convertirían en la próxima generación de líderes de la Torá. Aunque el hombre que una vez había tenido 24.000 estudiantes, ahora sólo tenía a cinco, sin embargo era por estos cinco que los judíos fueron rehabilitados. Ellos hicieron lo que Bar Kojba no podía hacer. Golpearon a Roma. Se convirtieron en las "aguas que desgastan la roca."
Con "Uno" en los labios.
Cuando Adriano publicó sus terribles decretos prohibiendo la práctica del judaísmo, y, en particular, enseñar Torá sería castigado con pena de muerte, fue el rabino Akiva quien audazmente se puso de pie en una plaza pública y comenzó a enseñar la Torá. Los romanos, en efecto, lo arrestaron y lo pusieron en la cárcel. En la misma prisión estaba su amigo Pappus, quien fue capturado por la venta de bienes en el mercado negro. “Feliz es usted, rabino Akiva.” Pappus le dijo, "que fue arrestado por enseñar la Torá. ¡Ay de Pappus!, que fue arrestado por tratar de ganar unos cuantos dólares ".
Rabí Akiva fue ejecutado por los romanos en la víspera de Yom Kipur en la ciudad de Cesarea, donde aún hoy se pueden ver las ruinas del Hipódromo, que fue el escenario donde los romanos ejecutaron a las personas en público. A pesar de que lo torturaron hasta la muerte, recitó las palabras finales de un judío, el gran anuncio de la fe en D's y en Su unicidad, "Escucha, oh Israel, D's es nuestro D's; D's es Uno".
Sus estudiantes, que estaban parados cerca, mientras que los romanos fueron desollado su carne con una especie de peines de hierro, le preguntaron: "¿Incluso hasta ahora?" ¿Sigues pensando acerca de tus obligaciones para con D's, incluso en este horrible y trágico momento?
"Toda mi vida", les dijo: "Esperé la oportunidad de mostrar lo mucho que amo a Dios, y ahora que tengo la oportunidad ¿debo desperdiciarla?" Entonces, "murió con la palabra Uno" en los labios, dice el Talmud (Berajot 61b).
Sus estudiantes, que estaban parados cerca, mientras que los romanos fueron desollado su carne con una especie de peines de hierro, le preguntaron: "¿Incluso hasta ahora?" ¿Sigues pensando acerca de tus obligaciones para con D's, incluso en este horrible y trágico momento?
"Toda mi vida", les dijo: "Esperé la oportunidad de mostrar lo mucho que amo a Dios, y ahora que tengo la oportunidad ¿debo desperdiciarla?" Entonces, "murió con la palabra Uno" en los labios, dice el Talmud (Berajot 61b).
Tumba del rabino Akiva en Tiberíades
Según la leyenda, el profeta Elías se reunió con sus alumnos y se llevó sus restos desde el lugar de la ejecución a una cueva fuera de la ciudad de Tiberius, que es hoy el lugar tradicional que marcamos como el lugar de enterramiento de Rabí Akiva. Sin embargo, el rabino Akiva no está muerto. Rabí Akiva está vivo dentro de todos y cada uno de nosotros. Cada héroe y mártir que el pueblo judío ha tenido son el rabino Akiva. Cada momento de amor es el Rabino Akiva. Cada pedazo de Tora es el Rabino Akiva.Es por eso que el mundo judío lo atesora.
Es por eso que él es el héroe de héroes. Poseía todos los grandes rasgos humanos que el pueblo judío poseen: el amor, la compasión, la calidez, el humor, etc. Él se hizo cada judío en su mejor momento, incluso en las circunstancias más difíciles. Se convirtió en la persona cuya humanidad es victoriosa al final a pesar del sufrimiento sin par. Se convirtió en el agua que desgasta la piedra.
